Manual de asistencia farmacéutica en centros residenciales para personas mayores.

Autor: Raúl Vaca Bermejo, Jordi Casas Sánchez, Fini Pérez Martínez, Elena Salgas Tolosá, Ignasi Ylla-Català Boré y Eugeni Sedano Monasterio

Es de sobra conocido el perfil de los usuarios de centros residenciales: pluripatología, polimedicación, gran dependencia para realizar las actividades de la vida diaria, alta complejidad clínica, frecuente deterioro cognitivo y hospitalización. Desde el punto de vista del medicamento, los usuarios de estos centros son una población con mayor susceptibilidad a la acción de los fármacos, con polimedicación, con un aumento en el riesgo de interacciones entre los medicamentos y de los efectos adversos, además de presentar dificultades para asegurar la correcta adherencia y cumplimiento al tratamiento, si bien es cierto que el seguimiento de un correcto protocolo de administración de estos productos por parte del centro residencial podría solucionar estas dificultades.

Se reconoce que este perfil y el alto consumo de medicamentos puede llevar asociado un gran número de problemas relacionados con el uso de los mismos, y se asocia a mayor cantidad de hospitalización, morbilidad, mortalidad y descenso de la calidad de vida. Además, los cambios en la farmacocinética y en la farmacodinámica asociados con la edad aumentan el riesgo de padecer problemas relacionados con el uso de los medicamentos.

Todo ello nos sirve para justificar que es necesario prestar unos servicios de alta especialización en asistencia farmacéutica en los centros residenciales para personas mayores si se quieren optimizar los resultados en la salud y, por lo tanto, en el bienestar y calidad de vida de los usuarios de dichos centros.

La incorporación de un farmacéutico en el equipo asistencial de un centro residencial para personas mayores contribuirá sustancialmente en la medida en que este profesional adopte el rol máximo responsable y referente en el uso adecuado, seguro y efectivo de los medicamentos. Más en detalle, el farmacéutico se encargará de velar por la seguridad, efectividad o sostenibilidad de los tratamientos farmacológicos y de que, tanto los profesionales como los usuarios y su entorno afectivo, tengan la información necesaria para obtener los máximos beneficios posibles de su tratamiento farmacológico.

En definitiva, este es un documento de máximos en el que se trata de especificar cuáles serían las funciones de un profesional farmacéutico dentro del equipo asistencial de un centro residencial para personas mayores con el objetivo de mejorar su bienestar y calidad de vida.

Este documento es fruto de una iniciativa impulsada por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos en colaboración con Fundación Edad&Vida.