No exageramos si decimos que las vacunas son uno de los avances más importantes de la historia de la medicina; gracias a ellas, enfermedades como la poliomielitis, el sarampión y la viruela han sido controladas o eliminadas en muchas partes del mundo, salvando millones de vidas cada año.
Su funcionamiento es sencillo. A través de las vacunas “entrenamos” a nuestro sistema inmunológico a reconocer y defenderse de agentes infecciosos específicos, como virus o bacterias, antes de que puedan causar enfermedades. A través de las vacunas introducimos en nuestro cuerpo un antígeno seguro que no causa la enfermedad, pero que es suficiente para que el sistema inmunológico lo identifique como una amenaza y actúe. En caso de infección real, el sistema inmunológico ya
estaría listo para actuar rápidamente, reduciendo y/o eliminando los síntomas de la enfermedad y evitando que el patógeno se multiplique de forma descontrolada 1 .
Cuando envejecemos, nuestro sistema inmunológico se debilita, y nos hace más vulnerables. Este deterioro del sistema inmunitario provocado por el avance natural de la edad se llama Inmunosenescencia y hace que enfermedades que pueden ser intrascendentes en personas jóvenes se compliquen en personas mayores o con sistemas inmunitarios debilitados 2 .
Tanto es así, que la inmunización se incluye cada vez más como una de las estrategias principales para promover una vida saludable 3 .
Las vacunas son seguras y nos protegen siempre; también cuando somos mayores. La vacunación contra enfermedades infecciosas como la gripe, COVID, neumococo o herpes zoster es especialmente importante en la población mayor, debiendo
considerarse como parte de un estilo de vida saludable. La prevención de éstas enfermedades ayuda a fortalecer nuestro sistema inmune y nos ayudan a que algunas enfermedades crónicas como la diabetes o enfermedades cardíacas, no se agraven con otras infecciones, disminuyendo así las hospitalizaciones 4 .
Fundación Edad&Vida, en colaboración con GSK, te invita a revisar tu calendario vacunal. Síguelo para invertir en tu salud, mejorar tu calidad de vida y a cuidar a los que nos rodean.
Las vacunas son una inversión para la salud personal y el bienestar de la sociedad.
La seguridad de las vacunas
La que aportan las vacunas a las personas sénior